MANIFIESTO DEL 1 DE MAYO DE 2025
¡UNIDAD IBERÓFONA CONTRA EL IMPERIALISMO DEPREDADOR, CONTRA LA GUERRA MUNDIAL Y LA EXPLOTACIÓN ESCLAVISTA DE LA CLASE OBRERA!
Las Vanguardias Socialistas Iberófonas:
Vanguardia Española, Vanguardia Venezolana, Vanguardia Colombiana, Vanguardia Comunista de Chile, Bloque Revolucionario Obrero y Campesino de Costa Rica, Vanguardia Argentina para la Liberación y Vanguardia Mexicana
Publican este Manifiesto para este 1 de Mayo, día internacional de la clase obrera, volviendo a movilizarnos como lo hicimos, por primera vez, en este mismo día el año 2024, primera movilización conjunta de todas las Vanguardias que establecimos como tradición política de nuestro movimiento internacional. La coyuntura política de este 2025 es similar a la del año pasado, con sus particularidades y, también, sus riesgos. Pues la posibilidad de una Gran Guerra mundial es, cada vez, más plausible. Y nuestra tarea, hoy, es advertir, persuadir y actuar ante ello en nuestras respectivas naciones políticas. Este escrito inicia esta función, pues aún las naciones más lejanas geográficamente de los grandes focos bélicos del presente se verían afectadas por un conflicto bélico internacional a gran escala y con el armamento y la tecnología actuales. Por todo ello, publicamos este manifiesto para todos nuestros compatriotas. La situación es de máximo riesgo para todos. Y no hay otra que la movilización.
¡Trabajadores de los pueblos iberófonos! Hoy, 1 de Mayo, no conmemoramos: luchamos. En un mundo fracturado por el anglocapitalismo salvaje, la Iberofonía —ese espacio civilizatorio donde el español y el portugués unen a 861 millones de personas— no es solo una herencia lingüística. Las Vanguardias Socialistas Iberófonas entienden la Iberofonía como un proyecto anti-neocolonial, como una barricada contra el saqueo anglosajón y una esperanza concreta para un pueblo-civilización no reconocido como tal. Hay datos que deberían salir más en los medios de comunicación, pero hemos de recordarlos nosotros en nuestro escrito de hoy.
Mientras el 1% más rico acapara el 45% de la riqueza global, nuestros pueblos sufren:
Frente a esto, las Vanguardias Socialistas Iberófonas levantamos la bandera de la unidad civilizatoria revolucionaria. No queremos que nuestros pueblos sean víctimas de la situación: queremos construir la fuerza política que derrotará al angloimperialismo que nos ha sumido en Dos Siglos de Humillación que duran hasta hoy día, y que explican los datos antedichos.
El gobierno de Sánchez, completamente subordinado a la Unión Europea y a la OTAN, remilitariza España mientras juega internacionalmente con aproximarse a una China cada vez más poderosa. Pero su compromiso con Ucrania y contra Rusia amenaza con la leva de tropas compuestas de jóvenes españoles de 18 a 25 años y, también, de jóvenes inmigrantes, a los que ya ve como mano de obra militar al servicio de la OTAN. Todo ello mientras los efectos de las inundaciones en Valencia siguen activos, con miles de nuestros compatriotas sin casa o buscando a familiares desaparecidos, en una situación de apatía social y desmovilización política debido a la inopia de las “izquierdas” y al dominio total del PSOE sobre los sindicatos “de clase”. Vanguardia Española llama a la movilización contra la Guerra en España y en Europa, y por la neutralidad nacional ante el conflicto en Ucrania, completamente ajeno a los intereses del país.
La inflación del 196% y los despidos masivos en el sector público son un crimen de clase. Javier Milei está desarrollando en la Argentina lo peor del anarco-capitalismo que sigue con lo peor de las medidas liberales macristas y menemistas que hace un cuarto de siglo llevaron al país al corralito, mientras reprime jubilados, obreros, sindicalistas y a todo el pueblo argentino en general. Vanguardia Argentina para la Liberación llama a la resistencia nacional-popular, al apoyo a los piquetes huelguísticos, a la construcción de una alternativa de los trabajadores y grita, 25 años después y de nuevo: «¡Que se vayan todos los cipayos entreguistas que firman con el FMI!».
Las sanciones de EE.UU. han costado a Venezuela $300.000 millones desde 2017. No obstante, y a pesar del bloqueo económico, la economía venezolana crece a pesar de la sangría migratoria que sufre y a la pobreza general de la población. Ante ello, Vanguardia Venezolana moviliza y organiza las comunas barriales populares para producir alimentos, formar a la ciudadanía y aplicar el materialismo político en los barrios, en los pueblos y en las ciudades, siendo la primera en hacerlo. Vanguardia Venezolana inicia la construcción del socialismo con características iberófonas. Y aspira a que su trabajo sea ejemplo en todo el país y en el resto de naciones con Vanguardias y más allá.
Más de 400 líderes sociales han sido asesinados desde el año 2022. Resulta inquietante la incapacidad por parte de las autoridades para enfrentar grupos que operan al margen de la ley y controlar la totalidad del territorio nacional. Se suceden en el país olas de violencia armada, huelgas cafeteras y movilizaciones de guardias de indígenas trabajadores, que exigen el cumplimiento de las medidas sociales prometidas por el gobierno, así como garantías de seguridad en sus territorios. Todo esto mientras el presidente Petro no puede mantener la estabilidad ni siquiera dentro de su propio gabinete ministerial. Vanguardia Colombiana está lista para actuar por su patria e invita a todos los trabajadores colombianos a unirse a su proyecto: el único con el potencial de convertir a Colombia en una nación políticamente soberana, económicamente independiente y en la que prime el bien común, recuperando la grandeza que le corresponde.
La privatización encubierta del litio controlado por empresas canadienses junto a la burguesía nacional, y la continuación de la represión hacia comunidades indígenas campesinas en el sur, revelan la verdadera función del gobierno de Gabriel Boric, una subordinación de rostro jovial y correa económica color rosa y verde con arcoíris wokes e indigenistas, pomada que supuestos comunistas se dedican a reforzar en vez de trabajar por la clase obrera con problemas de desempleo, inseguridad y aumento del costo de vida como de la vivienda. Boric condena otras experiencias socialistas en la Iberofonía impulsando la enemistad con los hermanos hispanos mientras se codeaba servilmente; por interés anglosajón; con el títere ucraniano atacante de sindicatos. Persiguió una nefasta propuesta constitucional que hubiese facilitado cortar Chile como un pastel para que las trasnacionales se sirvieran más fácil de nuestros recursos.
Por ello Vanguardia Comunista de Chile insta a que los trabajadores identifiquen los intereses estratégicos de Chile, a por la industrialización y la alianza Hispana-Iberófona, porque todo proyecto social requiere de su espacio geopolítico que lo sustente y su músculo industrial que lo financie. En las elecciones presidenciales que vienen no hay alternativa económica, se mantiene la visión de Chile como exportador de materias primas en la división internacional del trabajo, así gran parte del espectro ideológico chileno es, en realidad, antichileno.
Costa Rica atraviesa un momento crítico en su historia institucional. La burguesía nacional, históricamente beneficiaria del aparato estatal, ha evolucionado hacia una clase parasitaria que depende del Estado para reproducir su poder económico y político. En las últimas décadas, este sector ha entrado en disputa con una nueva burguesía asociada al capital extranjero, lo que ha intensificado la entrega de recursos estratégicos, servicios públicos y territorios costeros sin una regulación efectiva. Este proceso ha debilitado la estabilidad democrática del país y ha generado una creciente descomposición social.
La violencia, el deterioro de los servicios públicos y la pérdida de confianza en las instituciones no son fenómenos aislados, sino síntomas de un modelo que prioriza el beneficio de las élites económicas por encima del bienestar colectivo. En este contexto, organizaciones como el Bloque Revolucionario Obrero y Campesino (BROC) denuncian que el Estado ha sido capturado por intereses privados y llaman a la clase trabajadora a organizarse frente a las oligarquías que controlan las estructuras de poder. Según este planteamiento, solo a través de la movilización popular y la recuperación del control democrático sobre el Estado sería posible frenar el avance del capital sobre los derechos sociales y la soberanía nacional.
Bajo el tratado comercial, obreros de maquiladoras en México llegan a ganar tan poco como $8 al día. Se trata de una de las formas más extremas de esclavitud asalariada que existen en el mundo. El gobierno de Claudia Sheinbaum, siguiendo la línea del anterior de AMLO, afirma defender al pueblo a través del desarrollo de la llamada 4T, pero en la práctica se halla en una situación todavía de subordinación extrema a EEUU, país que en 1848 arrebató más de la mitad del territorio soberano heredado del Virreinato de Nueva España, así mismo, una parte de la población mexicana asume un riesgo grandísimo al seguir viendo a EEUU como el “mejor socio comercial” del que se dispone, subordinando la política a intereses económicos particulares.
Mientras tanto, la narcoburguesía capitalista (ilegal y alegal) sigue sembrando el terror en el país, valiéndose de ingentes masas de lúmpenes, nacionales y extranjeros, para oprimir y envenenar a la población del país, como se demostró con el descubrimiento del “campo clandestino” del Rancho Izaguirre en Teuchitlán, Jalisco, en el que, por casi 10 años, se recluyó y entrenó forzadamente a mexicanos e inmigrantes centroamericanos, indoctrinanadolos y forzándolos a crueles regímenes de adiestramiento que costaron la vida a muchos de ellos, todo esto con el conocimiento ya muy probablemente complicidad de autoridades estatales y nacionales, junto con el bien conocido “visto bueno” de los EEUU.
En este contexto, Vanguardia Mexicana afirma que México es la nación Iberófona que más imperiosamente necesita una revolución política radical, tanto para acabar con el narcocapitalismo como con las “izquierdas” y “derecha” vendepatrias, así como con la subordinación angloestadounidense sobre nuestro país que, al contrario que la pregona de Trump, como cabeza de una iberofonía unida potente, sí será grande otra vez.
Trump, siguiendo a Biden, impone aranceles del 125% a productos chinos aunque recula en los tecnológicos de última generación de los que depende hasta el Complejo Industrial Militar de EEUU, mientras China domina la producción industrial y tecnológica del Planeta. La UE, sumisa a la OTAN, gasta el 2% de su PIB en armas mientras recorta subsidios sociales, preparando a Europa para ser campo, una vez más, de una guerra mundial que, a diferencia de las dos anteriores, sí tendría efectos devastadores en todo el Mundo. Estamos en una Segunda Guerra Fría que podría convertirse en caliente en cualquier momento. No es solo una guerra entre Estados e Imperios. Es una guerra entre clases, es la guerra del capital contra los trabajadores de todos los países, incluidos los de los países imperialistas y globalistas. Tres son hoy los focos principales, como guerras proxy, donde todo podría estallar a gran escala.
En 2024 hubo 120 millones de desplazados en todo el mundo, por hambrunas, conflictos bélicos y por pobreza. La enorme deuda externa que sufren los países africanos, las ayudas que nunca llegan o que, cuando llegan, son aprovechadas por las clases dirigentes de sus países para, mediante corruptelas acrecentar su poder y tratar de mantenerlo, más la acción de mafias de traficantes de personas que abren rutas terrestres, aéreas y marítimas para llevar inmigrantes ilegales a Europa y América, con la aquiescencia de fondos financieros anglosajones y diversas ONGs convertidas en compañías “negreras” de nuevo cuño, convierten a buena parte de la población africana en un inmenso lumpenproletariado internacional que, por cuestiones sobre todo religiosas (la mayoría viene de países islámicos) choca con la población autóctona, generando enfrentamientos interreligiosos e interétnicos con los trabajadores autóctonos en barrios obreros, que es a donde suelen llegar. La denuncia de estas mafias y ONGs es fundamental para señalar a los principales culpables, cómplices y responsables de este tráfico humano que genera tensiones en los lugares de llegada y sangría de juventud en las naciones de las que emigran. Mientras todo esto ocurre, la tecnociencia se desarrolla enormemente. Hoy, el 14% de los empleos en la Iberofonía están en riesgo por el desarrollo de la llamada “Inteligencia Artificial”. Las multinacionales reemplazan obreros con algoritmos, pero también acaban con la dirección empresarial tradicional. La tecnología debe estar al servicio del pueblo, y no contra él.
Por todo ello, trabajadores del mundo iberófono, nosotros nos movilizamos y llamamos a la movilización contra la guerra imperialista depredadora que se nos cierne. Debemos rescatar el NO A LA GUERRA como grito político de lucha en tiempos en que la pobreza, la esclavitud asalariada generalizada y los retos geopolíticos (inmigración, guerras comerciales y de divisas, guerras proxy, etc.), están transformando radicalmente nuestras realidades. Por todo ello:
La Iberofonía no será el patio trasero de nadie. En cada fábrica ocupada, en cada escuela pública defendida, en cada barrio que resiste a los desalojos, está naciendo el socialismo con características iberófonas.
El capitalismo nos ofrece miseria, guerras y extinción. Nosotros respondemos con internacionalismo, lucha y esperanza radical.
¡Viva el 1 de Mayo!
¡Viva la unidad obrera de la Iberofonía!
¡Hasta la victoria, siempre!